lunes, 14 de septiembre de 2015

La arquitectura de la realidad

Hace unos días, El País -en su suplemento cultural Babelia de fecha 29.08.15- publicó una entrevista con el estudio H Arquitectes, en la  que se hizo patente su posicionamiento profesional, claramente marcado por una huida de la "estética por la estética" y un reencuentro con valores menos etéreos de la profesión.
Particularmente, el hecho de asumir la realidad y basar sus argumentos en la misma, me parece una manera inteligente de plantearse los proyectos en los momentos actuales. De hecho, se trata de una estrategia en la que cabe la crisis, la praxis constructiva.... e incluso la carencia de un estilo propio que implique un sello formal personal (lo cual, en este caso, debe entenderse como algo positivo dado que genera la posibilidad de disfrutar de un mayor grado de libertad creativa).
Precisamente, este punto de la carencia de estilo me recuerda -de manera directa- el concepto de "arquitectura sin arquitectos", pero aplicada en este caso a una arquitectura que comparte principios (que no estética) con la arquitectura tradicional; arquitectura de la necesidad, de los recursos posibles, de la economía, de la lógica constructiva....en definitiva, una arquitectura que quiere volver a retomar algunos de los valores básicos de la propia disciplina y que, en los tiempos de bonanza, parecían haber sido olvidados o sustituidos (el famoso" todo vale").
Creo que es una buena manera de afrontar el momento actual, en el que los arquitectos debemos conectar con la realidad y ser muy conscientes de aquello que la sociedad nos demanda, intentando aportar nuestro valor añadido asumiendo parámetros tan determinantes como el ahorro energético, la sostenibilidad o la calidad de vida.


Quizás, como decía Coderch, en su escrito "No son genios lo que necesitamos ahora" (1961), "necesitamos aprovechar lo poco que de tradición constructiva y, sobre todo, moral ha quedado en esta época en que las más hermosas palabras han perdido prácticamente su real y verdadera significación".

martes, 25 de agosto de 2015

La iluminacion en la Casa Tugendhat: escribir sobre arquitectura

Como colaborador de la revista iCandela, aprovecho estos días de verano para recabar información en relación a la Casa Tugendhat con el objetivo de comenzar a escribir un artículo sobre su iluminación. De esta manera, completaré la trilogía dedicada a tres viviendas claves del Movimiento Moderno, construidas alrededor del año 1929, por Adolf Loos (Villa Müller), Le Corbusier (Ville Savoie)  y Mies Van der Rohe (Villa Tugendhat).

De hecho, este inicio del proceso de elaboración de dicho artículo ha coincidido con mi visita a la exposición sobre la obra de Álvar Aalto en el Caixaforum y con el reencuentro con su frase "I do not write. I build". Digo reencuentro porque -en mis tiempos de estudiante de Arquitectura- colaboré en el despacho de José Luis Mateo y, siendo éste director de la revista Quaderns, ya le escuché alguna frase similar.

Todo ello me ha hecho reflexionar sobre lo que supone para un arquitecto escribir sobre arquitectura; si bien el objetivo prioritario es (siempre y casi obsesivamente) proyectar y construir, creo que escribir ayuda -como en tantas otra cosas- a fijar las ideas. Y, aunque se trate de obras ajenas, no dejan de ser ideas arquitectónicas que pasan a formar parte de nuestro bagaje (y que, posiblemente, en algún momento emerjan en nuestra propia obra).
Además, el propio proceso de escribir se puede entender como paralelo al proceso de proyectar: hay que recabar información, analizarla, interiorizarla, y,  como consecuencia de lo anterior, generar un producto cultural (ya sea escrito o construido) fruto de la interpretación personal.
Pero, y ahí está la gran diferencia, divagar sobre arquitectura no requiere -ni mucho menos- de los tiempos ni de los medios que necesita la formalización de la propia arquitectura (siempre que entendamos que esta última necesita de su materialización para poder valorarse como tal).
Por eso, en estos tiempos de crisis en que dichos medios escasean y la posibilidad de construir es cada vez menor,  reflexionar y escribir sobre arquitectura se ha convertido en una buena alternativa.

"I can not build, I write".



domingo, 16 de agosto de 2015

RETOMAR

Existen dos momentos durante el año en que nuestro cambio de hábitos nos ayuda a salir de la vorágine del día a día y a tomar distancia para mirar alrededor: las vacaciones de verano es uno de ellos; el otro -evidentemente- es la Navidad. 
La consecuencia de ese "coger aire" se trasforma en el deseo de retomar temas que se encuentran aparcados y los cuales nos dan la sensación inequívoca de tener algo pendiente. Este es el caso de nuestro blog; sabemos que es una interesante vía de comunicación pero siempre que -como todo- tenga una continuidad como consecuencia de una dedicación.
Y es por ello que hemos decidido volver a coger el hilo.
Además, en un momento en que realmente la comunicación basada en la imagen está tomando un auge inusitado, creemos que es importante completarla (o contrarrestarla) con la palabra ya que -a pesar del valor de la imagen- hay cosas que sólo se pueden tratar con palabras (y, si es posible, con su intercambio).
Deseamos que nuestras intenciones de futuro se mantengan y que nuestro blog llegue a ser una herramienta de comunicación.
Retomamos el contacto.